Punto Fijo es una urbe muy bien conformada beneficiada de la actividad comercial que genera el hecho de ser puerto libre.
Nunca habíamos estado en esta ciudad pero sí habíamos escuchado mucho de ella y a decir verdad, seduce su comercio y nada más.
La ciudad está repleta de Centros Comerciales y tiendas, todos ofreciendo rebajas. Lo más costoso es el alojamiento y la comida porque paradójicamente las instalaciones hoteleras son mínimo tres estrellas y ofrecen una gama de servicios que benefician el placer pero perjudican el bolsillo. Aunque, claro está, que el que va allí va a gastar.
Estuvimos todo el viernes recorriendo la ciudad y buscando ofertas en lo más necesario para la casa allá en Turmero, souvenirs para nuestras familias en San Diego de los Altos y en San Cristóbal y dándonos gustos con moderación eso sí...
Las niñas han disfrutado muchísimo de sus vacaciones adelantadas y eso me alegra porque no todo el tiempo se puede pasear en familia y aunque se que muchos me juzgarán de irresponsable por no dejar que mis hijas concluyeran el año escolar, considero que mis hijas están más adelantadas con respecto a la educación tan lamentable que ofrece la escuela donde las inscribí.
De las muchas fotografías que tomé, pocas son para la exhibición, por así decirlo, ya que son meramente familiares, les ofrezco estas pocas de los distintos destinos donde estuvimos.
Amanecer con vista a la Catedral
Iglesia San Nicolás de Bari
Ensenada Las Piedras
Base Naval Bebedero Quieto
Redoma de bienvenida a Punto Fijo
Iglesia Sagrado Corazón de Jesús
Bahía de Carirubana
Gaviotas en su bote
Ocasos de Venezuela
Inolvidables estos atardeceres