En medio de las colinas del estado Falcón y por así decirlo, en medio de la nada; totalmente incomunicado y tras un día entero tratando de llegar, finalmente conseguí a San José de Seque.
Este es un pueblo agropecuaria, dedicado más que todo al ganado caprino. El asfaltado de las vías apenas se encuentra en la entrada al pueblo y dentro de él mismo, lo demás son carreteras de tierra.
Cuenta con una iglesia grande, esta sí posee un campanario de verdad, no como las que vi en días recientes, y además, tiene una plaza; creo que la única en su estilo, que está dedicada en honor al pueblo.
Hay también un terreno grande que se ha destinado al esparcimiento de los sequenses, en él se encuentran tres plazas; una en honor a un cura que ejerció su apostolado en estas tierras; la otra está dedicada a San José y la tercera es la plaza Bolívar.
Estas tierras, pese a lo inóspitas que son, son ricas en yacimientos arqueológicos y juegan de este modo un papel trascendente en la indagación histórica de los venezolanos.
Nuevamente el calor hace estragos en mi condición física, cada vez son menos frecuentes los cursos de agua dulce y cuando escasea debo esperar kilómetros y kilómetros para reabastecerme. Son pocos los negocios y expendios de comida en esta zona y como tal, la noche anterior me tocó pasarla durmiendo en la camioneta.
Hoy conseguí que una familia me acogiera y me diera algunos datos sobre el lugar y pese a que las condiciones no son muy óptimas, al menos estoy en un lugar seguro y cálido, porque en las noches hace un frío polar.
A diferencia de Lara, Falcón es una tierra sin muchos contrastes, la aridez de las tierras y lo extremo del clima son una constante. Hay muy poca vegetación y las condiciones viales nunca son las mejores. Dios mediante mañana sea más provechoso que estos dos días.
Este es un pueblo agropecuaria, dedicado más que todo al ganado caprino. El asfaltado de las vías apenas se encuentra en la entrada al pueblo y dentro de él mismo, lo demás son carreteras de tierra.
Cuenta con una iglesia grande, esta sí posee un campanario de verdad, no como las que vi en días recientes, y además, tiene una plaza; creo que la única en su estilo, que está dedicada en honor al pueblo.
Hay también un terreno grande que se ha destinado al esparcimiento de los sequenses, en él se encuentran tres plazas; una en honor a un cura que ejerció su apostolado en estas tierras; la otra está dedicada a San José y la tercera es la plaza Bolívar.
Estas tierras, pese a lo inóspitas que son, son ricas en yacimientos arqueológicos y juegan de este modo un papel trascendente en la indagación histórica de los venezolanos.
Nuevamente el calor hace estragos en mi condición física, cada vez son menos frecuentes los cursos de agua dulce y cuando escasea debo esperar kilómetros y kilómetros para reabastecerme. Son pocos los negocios y expendios de comida en esta zona y como tal, la noche anterior me tocó pasarla durmiendo en la camioneta.
Hoy conseguí que una familia me acogiera y me diera algunos datos sobre el lugar y pese a que las condiciones no son muy óptimas, al menos estoy en un lugar seguro y cálido, porque en las noches hace un frío polar.
A diferencia de Lara, Falcón es una tierra sin muchos contrastes, la aridez de las tierras y lo extremo del clima son una constante. Hay muy poca vegetación y las condiciones viales nunca son las mejores. Dios mediante mañana sea más provechoso que estos dos días.
Entrada a San José de Seque
El monumento a Seque y detalle del pueblo y su vialidad
Plaza de Bolívar
Plaza de San José
Iglesia de Seque, evidentemente, en honor a San José