domingo, 9 de enero de 2011

Urucure, Lara

Ayer me dediqué a recopilar el grueso de la información acerca de los principales hatos y haciendas del municipio Urdaneta; para mi fortuna mucha de ella estaba correctamente organizada y al día en política tributaria y censo y control de los animales y cultivos.
Ha hecho mucho frío en el estado Lara, inusual para estas tierras y mucho más para estas latitudes ya que prácticamente estamos a nivel del mar y en tierras muy áridas.
Hoy, accediendo a una invitación hecha por la señora Alba Ramírez, conocí una aldea más al norte de Siquisique, a escasos 25 kilómetros, donde ella tiene unas tierras destinadas al cultivo de caraota en escala menor, se conoce como Urucure o San José de Urucure.
Su aparición en cualquier libro de geografía es prácticamente nula, carece de historia política y apenas se menciona en algunos registros de la Alcaldía de Urdaneta.
La aldea debe tener unos 50 o 70 años y el entorno rural es lo más preponderante. Desde la distancia se puede avisorar la aldea ya que esta está aún más baja del tramo vial que, como es usual en las vías secundarias del municipio, está destapado.
Según mi guía, la señora Ramírez, la mayor parte del año estas tierras son bañadas por el inclemente Sol; sin embargo, hoy salió pero no calentó.
Lo gracioso de Urucure es que siendo una aldea donde no existen teléfonos y apenas algunas casas tienen eléctricidad, sí llega la Polar - principal cervecería de Venezuela -, hago el comentario porque me causó gracia que la entrada al pueblo estuviera, por así decirlo, auspiciada por dicha empresa.
Urucure cuenta con una iglesia múltiple, a pesar de ser una población con apenas treinta habitantes, la mitad de ellos son evangélicos y la otra mitad católicos. Tal vez es el primer lugar del mundo donde las religiones conviven tan bien, al punto que las instalaciones eclesiásticas son compartidas por ambos credos; evidentemente no todo el cronograma evangelizador lo cumplen las congregaciones, pero es interesante la unión entre ambos credos.
La producción agropecuaria de Urucure apenas cubre sus necesidades; afortunadamente para ellos no están tan lejos de la ciudad y en caso de una eventualidad tienen como subsistir.
Pasadas las cinco de la tarde regresé a Siquisique con la finalidad de arreglar mis pertenencias porque ya para mañana espero continuar mi camino.
 Valle de Urucure
 Entrada a la aldea de Urucure, como les dije, auspiciado por empresas Polar
 Casa de la señora Alba Ramírez, nótese lo humilde de las viviendas en esta zona larense
Iglesia múltiple de San José, ejemplo de convivencia religiosa