La primera, fue la base de los españoles en la conquista de los pueblos indígenas que moraban en los llanos venezolanos; está situada en los Andes barineses y su cercanía con Santo Domingo - Mérida, la hece puerta de entrada y nudo de comunicaciones entre ambos estados.
Altamira de Cáceres es irrigada por las aguas del Santo Domingo, muy crecido por estas fechas por la temporada invernal que está atravesando Venezuela. Tiene muchos vestigios representativos de su rico pasado y sus tradiciones son muy distintas a las de los pueblos y ciudades de Barinas.
Calderas es, al igual que Altamira, un importante núcleo en la producción agrícola, más no pecuaria. Tiene enormes extensiones de sembradíos de café y su gente es, como buen andinos, muy cordial y diligente a la hora de darnos a conocer algunas de sus tareas de sus tareas cotidianas.
No hay mucho que decir de ambas porque la verdad, aunque tuvieran lo mejor, no tuvimos el tiempo para conocerlas más a fondo.
Fue difícil este fin de semana cumplir con nuestras labores a cabalidad, la lluvia ha sido impostergable y aunque por momentos da pausas para que aparezca el Sol, no han sido lo suficientemente buenas las condiciones para trabajar.
Hoy hicimos entrada a Barrancas, esperamos noticias sobre el segundo informe que presentamos. Dios quiera que todo salga bien y me ayude a superar una cuota de nostalgia que me está atacando en estos días.