Desde las seis en punto de la mañana, durante tres horas y en dirección hacia el sur del estado Táchira, nos acostumbramos al pesado tráfico vehícular de gente que entra y sale desde estas horas a la ciudad de San Cristóbal. Es a partir de El Corozo donde las condiciones de transitabilidad mejoran y se agiliza mucho el recorrido.
El sur del Táchira tiene un panorama un poco similar al del norte de este estado. Abundan los verdes pastizales, el ganado vacuno y, como no, el Sol calienta más porque son tierras bajas. Desde carretera se puede apreciar el comienzo del día que, como en todo sitio rural, tiene lugar muy temprano.
la llegada a San Joaquín de Navay marca el drástico cambio al calor y a una variedad vegetal totalmente distinta. Aquí no predominan los cultivos de ningún rubro, sólo se aprecia el verde esmeralda de los amplios pastizales salpicados por una que otra mancha blanca o negra en la distancia y que no son más que alguna que otra vaca desperdigada de la manada.
A poco más de 15 minutos aparece nuestro destino, Puerto Vivas.
Puerto Vivas es un pueblo sin historia relevante, formado por pequeñas construcciones anárquicas en las riberas del Doradas. La pesca constituye su principal atractivo turístico y comercial ya que es el rubro más significativo de sus habitantes, quienes reparten sus faenas entre el río y el peonazgo en las fincas y haciendas que rodean la localidad.
La destreza de los pescadores sólo se compara con la inmensa variedad de especias piscícolas que ofrece el río. Aquí se usan los mismos métodos de antaño, no hay nada que implique tecnificación y casi se pesca lo necesario para el consumo doméstico.
Aunque es un pueblo pequeño y que no atractivo alguno, es muy visitado por los sancristobalenses y pobladores de las inmediaciones ya que el Doradas y el Uribante, más adelante del pueblo, son balnearios naturales por excelencia.
Como nota resaltante, la localidad marca el punto geográfico de origen de tres estados; Táchira, en donde se conoce como La Empalizada; Mérida y Barinas, aunque administrativamente depende de este último.
Concluido nuestro muestreo poblacional al ganado, a poco más de las siete de la noche, nos dirigimos hacia Guacas y de ahí a la población de El Cantón, a orillas del río Uribante; es aquí donde nos ha tocado pasar la noche, esperando que el día de mañana sea mucho mejor y que mejore de salud para hacer mi trabajo con más empeño.
Entrada a Puerto Vivas
Diría Luis Silva: "Mi llano, que lindo eres"
El Doradas en su esplendor
Un pequeño lugar de sosiego
Caravana de pescadores culminando su faena y nosotros, trabajando
Un pequeño malecón a orillas del río, sinceramente, muy bonito el lugar
Detalle del pueblo cuando comienza a caer la noche
Capilla La Empalizada
La noche llega, al fondo, Los Andes
La espesura del monte y la oscuridad nos traen a la memoria las leyendas del Llano
