Bitácora y Memorias // Blog et Mémoires: Macanillo, Táchira

Siguiendo la continuidad con respecto a la forma en que llevaba mis apuntes, seguiré describiendo los sectores que componen mi municipio capital, San Cristóbal.
Macanillo es mejor conocida como el sectro agrícola y rural de la ciudad, aunque conforma la parroquia Francisco Romero Lobo y en ella existen unas cuantas aldeas diseminadas a lo largo de la carretera entre la ciudad y el parque nacional Chorro del Indio, es Macanillo el pueblo más importante de todo el lugar.
Llegar a Macanillo en estos días, con el invierno a flor de piel, resulta un tanto complicado; sin embargo, en días donde el verano engalana estas montañas tachirenses resulta uno de los lugares más vistosos de la entidad.
El recorrido es sinuoso pero a medida que se avanza se obtienen unas panorámicas únicas de la capital tachirense. El predominio del bosque tropical es uno de los espectáculos más fenomenales de todo y a pesar que han aparecido algunos urbanismos por el crecimiento mismo de la ciudad, todavía sigue siendo verde el camino a la comunidad.
Es costumbre de los visitantes llegar a la Cruz de la Misión para comer las fresas con crema características de la zona, hoy en día la Alcaldía y la gobernación del Estado han abierto un camino para que atletas de todas las edades asciendan hasta este lugar a través de la urbanización Los Criollitos, es un camino bastante exigente y aún así, muy visitado.
Luego de la Alcabala de la Guardia Nacional, nos topamos con el parque nacional Chorro del Indio, este es el sitio ideal para tomarnos un buen calentao (aguardiente saborizado con frutas) y seguir camino, o a la Loma del Viento o al Chorro del Indio como tal. La Loma del Viento es un mirador natural muy visitado por los tachirenses, sobre todo los fines de semana.
Ahora, el Chorro del Indio es un balneario, tal vez el más cercano a la capital delTáchira, cuyo atractivo principal es su cascada. También es muy visitado por propios y extraños; sin embargo, reitero, en estos días es algo complicado transitar por el lugar ante la alerta de inundaciones de Protección Civil.
Siguiendo la misma vía del Chorro del Indio, cruzando la famosísima "Batea" nos internamos en unos parajes donde el verdor de los árboles nuevamente reina y no termina más sino hasta llegar a Macanillo.
Una de las situaciones que hacen un llamado de atención a los visitantes es que esta carretera no es tan fiable como se ve, usualmente es muy nublada y es natural que hayan accidentes de tránsito con vidas que lamentar, testimonio de ello son la cantidad de cruces y calvarios, incluso hay capillas, a lo largo de la carretera.
Macanillo no es tan grande como se piensa, es la pieza calcada de los pueblos tachirenses donde todo se enmarca en la Plaza de Bolívar, funeraria, posada, restaurant, todo está en los alrededores de la plaza.

La diferencia notable es que esta es, probablemente, la Plaza Bolívar más arborizada del Táchira, desde este mismo sector es de donde se pueden regresar a la ciudad de San Cristóbal gracias los Rústicos de La Florida.

Las casas son del tipo colonial, amplísimas y algunas cuentan con jardines ornamentales interiores. Aquí son innumerables las leyendas y cuentos de camino, se relata por parte de todos los habitantes sobre la fundación del pueblo e incluso de la leyenda del Indio vigía del parque nacional.

La iglesia es una estructura sencilla, cerrada al momento de nuestra llegada. Algo característico es el colorido de las casas, aquí todavía es posible que los niños jueguen en la calle ya que no hay mucho tráfico automotor.

Vale la pena el recorrido porque el sentimiento que abruma aquí es la paz. Es tal que incluso al principio cuesta respirar la pureza de su aire.

Estas fotos son viejas, no corresponden con el momento actual ya que, como les dije anteriormente, en estos días llueve en el estado y no es posible el tránsito hasta el lugar.